Recientemente he visto por quinta vez Hong Gil Dong con una amiga, que nunca había visto un drama coreano. Después de intoxicarla un fin de semana entero con la serie, me dijo que nunca estaría tan obsesionada con los dramas coreanos como yo.
¿Cómo saber si eres un/una drama addict? Para saber los síntomas de un/una adicto/a a los dramas coreanos tenéis que tener en cuenta los siguientes indicios:
El sentimiento de mariposas en el estómago cuando por fin los personajes se besan en el episodio 15 de la serie.
Mirar todos los blogs de K-Dramas.
Tener impaciencia por ver el siguiente capítulo cuando los miras ya en tiempo real (más o menos, porque si no sabes coreano tienes que esperar a que pongan los subtítulos por lo menos en inglés).
Ver la serie favorita una y otra vez como si fuera la primera.
Tener por lo menos un actor/actriz preferido/a y seguirlo/a en todos sus trabajos.
Hablar con gente que mira K-Dramas y darte cuenta de que estáis hablando el mismo idioma, incluso cuando no sea el español.
La emoción de tener tres nuevos dramas cada tres meses.
Ser capaz de hacer un mapa del aeropuerto de Incheon sin haber ido nunca a Corea.
Saber costumbres, palabras y comidas y adorarlas sin haberlas probado nunca.
Saber el verdadero significado de la palabra fighting.
Empezar a tomar fideos instantáneos con palillos coreanos (comprados por eBay) solo para estar más en el atmósfera de los dramas.
Aprender el idioma por gusto y saber más de la historia de Corea que de tu propio país.
La desesperación que sientes si una serie que te gusta no tiene subtítulos en un idioma que entiendas.
Hacerte preguntas sobre tu primer amor y pensar que nunca has vivido uno.
Desear tener un triángulo amoroso en tu vida solo para ver cómo es.
Sacar la batería del móvil cuando no quieres recibir llamadas, como consecuencia de la sobredosis de dramas coreanos.
Llegar a pensar que estar de cuclillas es la posición más cómoda del mundo.
La obsesión de ver películas coreanas.
Reconocer ya entre las caras asiáticas, cuál podría ser coreano/a.
Tener por lo menos un amigo coreano.
Frecuentar sitios web relacionados con Corea.
Empezar a usar BB Cream y CC Cream.
Usar gafas de pega solo para ser guay.
Soñar con ir a visitar Seúl, Busan y Jeju.
Querer ponerte en forma por si acaso llegas a Corea y no te dejan pasar en la aduana por sobrepeso.
Mirar cuánto vale un billete de avión de vez en cuando y cuánto dinero te haría falta para ir a Corea.
Intentar cocinar coreano de vez en cuando solo para tener más conexión con los dramas.
Sentirte como Alicia en el país de las maravillas en un golpe de ratón, entrando en el mundo de los dramas coreanos donde la chica siempre es pobre y de buen corazón, de la cual se enamoran siempre dos tíos muy ricos, y donde el segundo que no se queda con la chica sigue siendo amable y respetuoso hasta el final y donde los malos de la serie se llevan su merecido.
El sentimiento de tristeza profunda al pulsar el botón PLAY del último capítulo de la serie.
Seguramente hay mas síntomas que espero que nos comentéis. ¿Vosotros sois drama addit?