¿Qué elementos tienen en común eventos las Olimpiadas de Invierno de Pyeonchang 2018, la Copa mundial FIFA Sub-20 2017 y los Juegos Olímpicos de 1988? A aparte de los valores que aúna la práctica de cualquier deporte, todos estos eventos tenían a un tigre como mascota: tigre siberiano (2018) o tigre Amur (2017 y 1988).
La figura del tigre ancestral
Es considerado un buen auspicio por los coreanos. El tigre está asociado al mito fundacional de Corea. Dos animales sagrados, un oso y un tigre, pidieron a una deidad superior convertirse en humanos. La osa llegó a convertirse en mujer engendró a quien resultaría ser Dangun o padre fundador del reino de Gojoseon. El tigre siguió siendo un animal, pero asociado siempre a los dioses.
A lo largo de los siglos, se le atribuyeron determinados valores, como la valentía y la benevolencia, así como la capacidad de ahuyentar los malos espíritus en las montañas. De ahí muchas aldeas y templos de las montañas coreanas tienen en sus murales al tigre como modo de atraer la buena fortuna. También las tumbas de la dinastía Joseon tienen entre las estatuas custodias sendos tigres.
Incluso, al modo de nuestro de «Érase una vez, hace mucho tiempo...», en Corea se dice «Erase una vez, cuando el tigre fumaba en pipa…«. Es una forma de referirse a una época ancestral en la que los coreanos vivían en simbiosis con esta figura.
Tras la dinastía Joseon
Con la llegada de la ocupación japonesa en el siglo XX, los coreanos se refugiaron en la idea de su Península como un tigre que intentaba revolverse del opresor japonés. Un intento de aunar el espíritu nacional bajo el animal que representaba la fuerza en Asia, el tigre.
A la versión que se le reconocía mayor sabiduría es al tigre siberiano. Ya que, según relatan las leyendas, superaba numerosas tribulaciones y se volvía mas sabio y humilde, pero debido al esfuerzo y a los disgustos perdía su típico color naranja.
En los últimos Juegos Olímpicos de Invierno se eligió como mascota a Soohorang, que aglutina las palabras soo, que se puede traducir por protección, y horang, como tigre. En la FIFA sub-20 de 2017 se optó por otro tigre como mascota, Chaormi. Y, anteriormente, en los Juegos Olímpicos de 1988, un tigre amur, llamado Hodori, fue el emblema elegido.
Además de introducir la figura del tigre en este tipo de eventos o en representaciones artísticas, también se trata de reintroducir ejemplares de tigre siberiano o amur en las cordilleras coreanas. Como handicap, la elevada densidad de población de Corea del Sur, dificulta el crecimiento de las colonias de tigres salvajes.
Intentos no faltan, ya que en Corea se vería como un reencuentro con sus raíces. Por ejemplo, en 2017, China donó 2 ejemplares para lograr que Corea vuelva a ser hogar del que siempre ha sido su animal mas emblemático.
Fuente:
- Seeley, J. Tigers—Real and Imagined—in Korea’s Physical and Cultural Landscape. 2015.
- Wikipedia