A pesar de que el conflicto armado y directo de la Guerra de Corea tuvo lugar dentro de la propia península, la influencia de segundos y terceros países a nivel económico y de vidas humanas no pasa nada desapercibido, y es que ésta sigue a las dos guerras mundiales como una de las más costosas del siglo XX en cuanto a vidas humanas (Miller, 2001:924). Catalogada por algunos como una de las muchas guerras de descolonización del siglo XX y llegando a ser conocida como “la Guerra Olvidada”, los que la analizan consideran los meses entre Julio y Octubre de 1950 como un punto de inflexión que marcó la historia dela Guerra Fría. (Warner, 1980:98)
Iniciada oficialmente al 25 de Junio de 1950 y “acabada” con el armisticio signado al 27 de Julio de 1953, siguen existiendo muchos puntos sobre los que los distintos estudiosos del conflicto no llegan a un consenso: ¿Hay que tener en cuenta los movimientos nacionalistas y revolucionarios que se iniciaron durante la ocupación japonesa? ¿Fue directa la influencia dela URSS cuando las tropas del Norte atacaron al 25 de Junio?… Un punto en el que coinciden la mayoría de expertos es que, con o sin conflicto, la división de la península era un hecho histórico, previsible e inevitable. (Castillo, 2002:71)
La mayoría de autores se ponen de acuerdo al situar los antecedentes dela Guerra de Corea durante los 35 años de ocupación japonesa, pues éstos habían dividido la península según sus intereses: el sur se había convertido en una zona pobre de agricultura y ganadería, mientras que el norte se había convertido en la zona industrial y rica. Sobre el año 1920 aparecieron movimientos cristiano-capitalistas modernizadores y marxistas-leninistas a Corea, pero estos trabajaban unidos contra la represión japonesa y no fue hasta el 15 de Agosto de 1945* que ambos iniciaron un conflicto que hubiese ocurrido con o sin ocupación americana y soviética. (Millet, 2001:927)
El paralelo 38 fue escogido como línea divisoria de contención por dos oficiales americanos**, y si bien debía ser temporal, el conflicto de la Guerra Fría la convirtió en permanente. Al Norte las industrias fueron nacionalizadas, los colaboradores japoneses expulsados y la tierra redistribuida, mientras que al Sur se dejó al poder los colaboracionistas japoneses ante la necesidad de personas con experiencia***, causando el descontento de los habitantes sureños que se unieron en guerrillas, viendo el comunismo del norte como su salvación. Así pues, dadas las circunstancias, la URSS confiaba en que a la larga toda la península pasaría de modo pacífico bajo el control comunista.
A pesar de todo, los intentos de crear un gobierno unido fallaron y en 1947, incapaces de encontrar una solución, el caso fue llevado ante las Naciones Unidas. Finalmente, ignorando la oposición de la URSS, al 10 de Mayo de 1948 se proclamaron elecciones al Sur y cinco días después se declaró la República de Corea con el presidente Syngman Rhee. En respuesta, el Norte declaró al 9 de Septiembrela República Popular Democrática de Corea con el presidente Kim Il-sung. Ninguno de los dos regímenes reconocía el otro, y así se inició a lo largo del paralelo 38 todo un seguido de enfrentamientos con la intención de reunificar el territorio y derrotar al gobierno opuesto.
Si bien es cierto que los soviéticos daban soporte militar y ayudas al Norte, la mayoría de autores tienen claro que no hubo una implicación directa en el ataque del 25 de Junio de 1950.La URSS fue sorprendida cuando las tropas de Kim Il-sung realizaron un ataque relámpago, anticipándose a los planes establecidos. Ese podría ser uno de los motivos por los cuales los soviéticos tardaron en reaccionar, además de la clara intención de minimizar su rol para evitar un conflicto directo con Estados Unidos (Stueck, 1976:623-632) ante el miedo de una III Guerra Mundial.
Así pues, el Norte, armado con tanques y artillería soviética y contando con la ayuda de veteranos de la Guerra Civil China, concluida hace poco, optó por un ataque veloz aprovechando que el Sur no estaba nada preparado para contener a su vecino, antes de que, como pasó pocos meses después, con la ayuda e intervención americana el Sur se convirtiera en un enemigo demasiado fuerte para ser combatido. A los tres días las tropas comunistas tomaron Seúl y siguieron avanzando hasta rodear a los nacionalistas y a las tropas americanas en el conocido Perímetro de Busan. Inmediatamente los Estados Unidos pidieron permiso a las Naciones Unidas para contraatacar bajo las órdenes del General Douglas MacArthur. Éstos, con un ataque sorpresa desde Incheon, recuperaron la capital al 28 de Septiembre y expulsaron el ejército de Kim Il-sung al norte. En pocos meses el combate había recorrido toda la península para volver a su punto de inicio. Seguidamente, ignorando el paralelo 38, las políticas de contención del presidente Truman y las advertencias de China, las tropas de las Naciones Unidas avanzaron hacia el norte con la esperanza de hacer caer a Kim Il-sung, pero Mao, considerando el avance una amenaza, respondió brutalmente con cientos de miles de “voluntarios” chinos. (Castillo, 2002: 73-76; Han, 2010:199-201; Korea Foundation, 2010:32-36; Wallerstein, 2010:21)
A principios de 1951 comenzaron las negociaciones del armisticio, éstas duraron 2 años durante los cuales siguieron existiendo batallas en ambos lados del paralelo 38. La ironía es que el armisticio de 1953 no presenta diferencias del propuesto en 1951 y que ninguna de las dos Coreas tuvo influencia al decidir como y cuando tenía que terminar el conflicto. (Stanley, 2009:44-61)
Cuando pensamos en la Guerrade Corea, únicamente pensamos en los ejércitos coreano, americano, soviético y chino, pero el conflicto benefició indirectamente a países terciaros como Japón, quien vio su economía recompensada, y afecto a otros 15 países de las Naciones Unidas****. Por eso, muchos autores se cuestionan hasta que punto se puede considerar una “guerra civil”: la península era y sigue siendo un punto clave para la contención del comunismo y su influencia a nivel internacional sigue siendo importante.
Acabado el conflicto, se estableció la famosa Zona Desmilitarizada como frontera entre ambos países: 4km de ancho y 250km de largo se convirtieron en tierra de nadie, e irónicamente, en una de las fronteras más militarizadas y con más tensiones bélicas del mundo, además de la última frontera de la Guerra Fría. A pesar de que el armisticio fue signado, el conflicto de facto sigue en pie, pues nunca se llegó al tratado de paz y siguen existiendo, de manera puntual, conflictos entre los regímenes vecinos. A lo largo de 59 años su relación ha ido variando desde décadas críticas a años en los que el sueño coreano de la reunificación parecía una realidad.
A nivel popular el miedo de muchos ha sido, y sigue siendo, un posible segundo ataque del Norte de manera injustificada, ya que se considera que sus dirigentes “no son racionales”, pero claramente esta es la idea de alguien que nunca ha estudiado el conflicto. Como bien analiza David C. Kang, al día de hoy una segunda guerra es improbable, pues aunque Corea del Norte tiene un ejército superior en número, no tiene la potencia necesaria para combatir la alianza entre Sur-Estados Unidos sin autodestruirse en el intento. Aunque sigue existiendo tensión, la balanza de poder es estable y las acciones de los dirigentes del Norte al aferrarse a la amenaza nuclear son racionales des del punto de vista de aquél que sólo quiere sobrevivir. Corea del Norte podría haber cometido atentados terroristas en Seúl, Tokio o Washington, pero nunca lo ha hecho ya que buscan la supervivencia, no la destrucción suicida. (Kang, 2003:319)
De cualquier modo, el conflicto sigue abierto y son muchos los que estudian sobre una posible reunificación coreana. Lo que muchos apuntan es que, quizá, Estados Unidos debería cambiar sus políticas exteriores de cara a Corea. Sea como sea, al día de hoy el resultado de lo que fue una guerra fraticida sigue siendo un tema sin cerrar.
Aclaraciones:
*Día de la Liberación en que Corea dejó de estar bajo el yugo japonés.
** La división fue propuesta el 10 de Agosto de 1945 durante la Conferencia de San Francisco. Los soviéticos aceptaron y se instalaron al norte, mientras que los americanos aterrizaron oficialmente a Incheon el día 8 de Septiembre del mismo año.
*** Hay que tener en cuenta que, en esa época, la península coreana era una zona que nadie sabía donde estaba y tampoco les importaba. Los americanos no prestaban real interés al comunismo norcoreano ya que para ellos era un “comunismo de juguete”, y por lo tanto en un inicio, no dieron al Sur las ayudas, los oficiales, ni los académicos que si proporcionaron a Japón tras la guerra.
**** A nivel militar intervinieron: Gran Bretaña, Australia, los Países Bajos, Canadá, Nueva Zelanda, Francia, Filipinas, Turquía, Grecia, Sur África, Bélgica, Luxemburgo, Colombia y Etiopía. Mientras que Suecia, India, Noruega, Italia y Dinamarca ayudaron con soporte médico. (Korea Foundation, 2010:36)
Bibliografía de consulta Castillo, Santiago. 2002. La unificación de Corea: el epílogo de la «guerra fría». Madrid: Catarata. Han, Young Woo. 2010. Modern/Contemporary Era. Vol. 3. A Review of Korean History. Trad. Hahm Chaibong. Gyeonggi:Kyongsaewon. Kang, David C. 2003. “International Relations Theory And The Second Korean War.” International Studies Quarterly 47(3):301-324. KoreaFoundation. 2010. The DMZ: Dividing the Two Koreas.Seoul:Seul Selection. Millet, Allan R. 2001. “Introduction To The Korean War.” The Journal of Military History 65(4):921-935. Stanley, Elizabeth A. 2009. Paths to Peace: Domestic Coalition Shifts, War Termination, and the Korean War.California:StanfordUniversity Press. Stueck, William. 1976. “The Soviet UnionAnd The Origins Of The Korean War.” World Politics 28(4):622-635. Wallerstein, Immanuel. 2010. “What cold war in Asia? An interpretative essay.” A The Cold War in Asia: The battle for Hearts and Minds. Eds. Zheng Yangwen, Hong Liu, Michael Szonyi.Boston:Brill. Warner, Geoffrey. 1980. “The Korean War.” International Affairs 56(1):98-107.